domingo, 14 de julio de 2013

Paso a paso: montar una tarta fondant


La primera vez que "tuve" (que sufrido suena eso eh? jajajaja, más bien quise) decorar una tarta con fondant se me hizo un mundo recopilar la información necesaria para llegar a un resultado al menos decente. Y eso que mi primera tarta fue un completo desastre!
Con este pequeño paso a paso, quiero recopilar mi pequeña experiencia en el mundo de las tartas fondant y compartirlo con quien se anime a sumerjirse en esta aventura... Eso si, yo advierto que es adictivo!, una vez se prueba con una tarta, es dificil parar....

Algunas consideraciones:

a) EL BIZCOCHO.
La base de una buena tarta es, en mi opinión, el bizcocho.
Las tartas fondant irán recubiertas de pasta de azúcar, unas veces con figuras superpuestas, y otras con figuras modeladas. Con lo cual, nuestro bizcocho debe ser denso, capaz de soportar peso.
Podemos utilizar un bizcocho genovés, un bizcocho de naranja o cualquier otro, como el brownie delicioso de chocolate.
Deberemos tener en cuenta que para que luzca un poco la decoración, el bizcocho debe quedar alto, para ello utilizaremos moldes adecuados.

b) EL RELLENO
Para diferenciar un bizcocho de una tarta, es fundamental bañar (calar) el bizcocho con almibar y rellenarlo.
El almibar (aqui mi receta) y el relleno tienen infinitas posibilidades, según los aromas que utilicemos: podemos añadir chocolate o esencia de frutas o vahinilla al almibar por ejem). También tenemos la posibilidad de jugar con la combinación de sabores entre el bizcocho y el relleno.
En casa, como somos muy "chocolatosos" nos gusta el brownie de chocolate relleno de ganache de choco y mermelada de fresa, pero la que más suele triunfar es la combinación de bizcocho de naranja relleno de ganache de choco.
Las tartas fondant deben ir muy muy caladas, puesto que al cubrir con el fondant, éste tiende a resecar la tarta, y es una pena hacer el esfuerzo en decorar y luego no disfrutar con la tarta porque ha quedado seca. Nunca se baña suficiente un bizcocho que va a ser cubierto.

c) EL FONDANT
El fondant o pasta de azúcar se hace con las tradicionales nubes de gominolas derretidas y azúcar glas. Ni corta ni perezosa, para mi primera tarta estudié varios tutoriales de internet y me aventuré a prepararlo casero... me llevó horas conseguir la textura adecuada y casi se me quitaron las ganas de repetir.
Afortunadamente, en tiendas especializadas existe fondant a granel, que podemos adquirir en color blanco y teñir con colorantes alimentarios específicos, o bien comprar incluso el fondant ya teñido.
Obviamente, comprar el fondant ya teñido resulta menos económico, pero depederá del uso que le vayamos a dar...
El fondant que no utilizemos, lo podemos conservar durante meses bien envuelto en film trasparente y en un bote hermético, alejado de luz y humedad. Nunca en la nevera. Es por ello, porque el fondant no puede ir a la nevera, que tendremos que tener en cuenta el relleno que utilizamos, que pueda estar sin frio un par de días al menos.

Una vez tenemos claro los ingredientes que vamos a utilizar, no queda más que ponerse manos a la obra....

1.- Preparar el bizcocho, bañar y rellenar

-  Cortar el bizcocho a capas (en el mercado existen unas sierras especiales para cortar el bizcocho a diferentes alturas)

- Bañar generosamente cada una de las capas en almibar
- Rellenar con ayuda de un cuchillo largo de forma que quede bien extendido el relleno.
Para terminar, cubrir con relleno puesto que necesitaremos algo sobre el bizcocho para "pegar" el fondant. Deberemos poner especial cuidado en que la capa superior quede lisa, para que al cubrir no se noten las imperfecciones. Una vez cubierto, dejaremos enfriar un poco en la nevera antes de cubrir.



2.- Cubrir con fondant


        ¡Por fín empieza la parte divertida!.

Extender el fondant sobre una superficie plana y limpia (nunca debemos olvidar que el fondant es comestible, y por tanto la higiene es fundamental al manipularlo) y con ayuda de un rodillo enrollarlo y dejarlo caer sobre la tarta





Luego recortaremos los sobrantes y con ayuda de un rodillo fino y un alisador, nos tomaremos nuestro tiempo en dejar la superficie lisa y los bordes arreglados.





3.- Decorar
Aquí ya es todo imaginación....
Podemos empezar haciendo una plantilla en papel y dedicarnos a recortar y "pegar" sobre el fondant las figuras cortadas. Para sellar el fondant teóricamente, necesitaremos un poco de agua, podemos utilizar un pincel para ello. Aunque dependiendo de la humedad del ambiente y el fondant que utilicemos, en la mayoría de ocasiones no hace falta nada para sellar fondant sobre fondant.

También podemos utilizar cortantes, que en el mercado tenemos infinidad de variedades y formas, para recortar figuras y pegar sobre el fondant. Utilizando combinación de formas y colores podemos conseguir un resultado llamativo sin complicarnos en exceso.


Por último, queda organizarnos para hacerlo todo y llegar a tiempo...  Hay que tener claro que una tarta, bien bañada y con el relleno adecuado, puede aguantar un par de días sin problema y estar perfecta para tomar. El fondant va a asentarse y los colores subirán de intensidad de un día a otro, puesto que al manipular el fondant, pierden intensidad. Por ello, deberemos terminar la tarta un día antes que la vayamos a presentar.
Si tenemos que tener lista la tarta para un sábado, una secuencia podría ser:
- Miércoles: almibar y relleno
- Jueves: bizcocho. Dejar enfriar y por la noche ya podíamos cortar, bañar y rellenar (o bien el viernes)
- Viernes: decorar

2 comentarios:

  1. hola les hago una consulta yo las pocas veces que lo he hecho cuando termino la torta la guardo en la heladera y cuano la saco se empieza como a derretir en fondat que es lo que hago mal, queda todo con gotitas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. el fondant no resiste bien la humedad. Por eso, una vez la tarta está cubierta, no se debe guardar en nevera. Incluso en verano es dificil trabajar el fondant porque si hace calor, pierde brillo y se queda más pastoso.

      Eliminar